Edficio de la
Fundación
Qattan

Viniendo del extranjero, la Fundación Qattan se percibe como un faro que trae la iluminación al pueblo palestino. Este papel como buque insignia de la cultura palestina necesita una imagen reconocible digna de representar su liderazgo social con un hito físico. Imaginamos este hito como una luz en lo alto de la montaña, visto desde todas partes y, aunque moderno y contemporáneo en su forma, está construido con la misma tierra y piedra palestina. El futuro edificio se dirigirá a una audiencia internacional con un lenguaje contemporáneo, pero lo que ofrecerá es la lengua vernácula local y cualidades muy particulares.

Como edificio ligado al suelo, está diseñado para estar en armonía con su entorno físico, aprovechando al mismo tiempo las características del sitio. El cuerpo principal se concibe como un zócalo de piedra tallado en terrazas en el suelo natural, potenciando la relación interior-exterior mediante el uso de celosías y pantallas permeables de piedra natural. Este uso innovador y contemporáneo de la piedra local se utilizará para revestir por completo un alto volumen de asientos transparentes en la parte superior del zócalo. Por lo tanto, este volumen funcionará como un faro, un hito brillante en la cima de la colina.

Se introducen espacios y elementos a escala humana para hacer que el edificio sea más suave y cómodo. La vegetación crecerá en los patios como en un jardín árabe, dando una sensación de frescura y fragancia.
En el lado de la sostenibilidad, estamos proponiendo algunos mecanismos simples pero muy efectivos, la mayoría de ellos ya utilizados por la arquitectura vernácula mucho antes de que el aire acondicionado entrara en escena. Al igual que los antiguos palestinos usaban los materiales que podían encontrar donde vivían, proponemos usar piedra caliza y baldosas de cerámica de origen local, ahorrando no solo el presupuesto, sino también mejorando la huella de carbono general y proporcionando materiales duraderos y de bajo mantenimiento.

Como conclusión nos gustaría enfatizar que estamos comprometidos con un diseño racional, funcional y económico, reconciliado al mismo tiempo con las cualidades locales antiguas que brinda la arquitectura vernácula, para lograr un entorno simple pero rico que el pueblo palestino sienta como propio.